Sostenibilidad
Diferencias entre el coche eléctrico y el coche de hidrógeno
La autonomía, el tiempo de carga o el impacto medioambiental son solo algunas de las diferencias que hay entre el vehículo y el de hidrógeno.
La autonomía, el tiempo de carga o el impacto medioambiental son solo algunas de las diferencias que hay entre el vehículo y el de hidrógeno.
La batería es uno de los componentes más importantes del coche y que más sufre los cambios de temperatura, por eso es importante llevar un mantenimiento.
Lo mejor que puedes hacer es dejar cargando el coche durante la noche en tu casa para asegurarte de que queda con el 100% de batería.
Las principales marcas de coches eléctricos han decidido ir también a por el mercado de los coches sin carnet para ampliar su catálogo.
El correcto mantenimiento y un uso de la energía adecuado conseguirá que la batería de tu coche eléctrico dure mucho más tiempo.
Además de planificar todas las calas y restaurantes a los que vas a ir en vacaciones, mira también en qué estación cargar tu coche eléctrico.
Las baterías de los coches eléctricos son también sensibles a las temperaturas extremas que se pueden dar en verano como las de los móviles.
Transformar tu vehículo de combustible en uno híbrido o eléctrico te ayudará tanto a combatir el cambio climático como a ahorrar dinero.
El vehículo EV de cero emisiones, además de ser más sostenible y menos costoso a nivel de combustible que el tradicional, ofrece otras ventajas logísticas para el día a día.
Este tipo de aplicaciones son imprescindibles para indicarte cuál es la carga de tu coche, dónde está la estación de carga más cercana y mucho más.
Con este sistema de carga podrás ahorrar energía en tu casa mientras la batería de tu coche llega al 100% de forma segura.
Te contamos todo sobre el consumo de los coches eléctricos y cuál es la verdadera autonomía de estos vehículos por carretera.
Aunque su tarifa media es más elevada que en los modelos de combustión, marcas como Renault o Dacia tienen alternativas eléctricas económicas.
Utilizar un cargador equivocado o conectarlo continuamente a una corriente demasiado potente pueden ser motivos por los que tu coche no carga.
Con unos sencillos cambios en la planificación y el mantenimiento de tu vehículo puedes conseguir que la misma batería te de para más kilómetros.